Góngora
Que vuestras suavidades son de arrope
Sobre zuecos de cómica poesía
Con cuidado especial vuestros antojos
Prestádselos un rato a mi ojo ciego,
Y entenderéis cualquier gregüesco luego
a Brindis, sin hacer agua, navega.
cuanto devota, se metió a romero,
Quevedo
Este cíclope, no siciliano,
éste, en quien hoy los pedos son sirenas,
éste es el culo, en Góngora y en culto,
Perro de los ingenios de Castilla,
Y en la Corte, bufón a lo divino.
¿Por qué censuras tú la lengua griega siendo sólo rabí de la judía, cosa que tu nariz aun no lo niega?
Comentario:
Góngora era el típico pelota de la Corte por lo que su lenguaje era muy rebuscado para intentar demostrar su alta cultura. Siempre buscando el necesario reconocimiento de todos.
Esta actitud engreída era la que denunciaba Quevedo que no buscaba tanto el perfeccionismo, sino que exponía sus pensamientos de forma más clara, más conceptista. Quevedo en su momento hizo un poema tan o más retorcido como los de Góngora, para demostrar que él también sabía hacer lo mismo, ridiculizar y dar una cura de humildad.
Como vemos en la encuesta la mayoría de gente prefiere a Quevedo antes que a Góngora por lo llamativo de sus versos soeces.
Kike y Jorge
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